Un regalito con mucho ritmo

Gracias Sara

Viendo el vídeo que es genial… ¡un ritmo impresionante! he recordado una vivencia de hace bastantes años. Yo entonces daba clases de español a extranjeros y habíamos recibido un grupo de ingleses que iban a estar con nosotras 3 semanitas. Un día – entonces éramos mucho más jóvenes y acompañábamos a los alumnos a muchas actividades – fuimos por la noche a un bar-discoteca estupendo. En el grupo de ingleses venían varias chicas negritas y coincidió por entonces una chica de Boston, blanquita,  que se creía ella muy bailona y que lo hacía muy bien. La de Boston se puso a bailar insinuándose y las negritas la miraban… una de ellas le dió en el codo a otra y empezaron a bailar. ¡Mama mía! ¡qué ritmo! La de Boston agachó las orejas y se fue a la barra. ¿Quién les habrá convencido a los negritos de que quieran ser iguales – que ya lo son en esencia, no es algo a pedir – que los blancos. ¡Ya nos gustaría vivir el ritmo de esa forma! – Es mi visión, claro. 

Qué lo disfruten… bailando. Un gusto

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