Una peli de regalo: El beso que nunca nos dimos

Regalito del Finder que vimos ayer

Un poco melosa y a ratos sabida. Sin embargo, nos encantó porque las sincronías son las que llevan la película. Y como ayer compartíamos una entrada sobre ello… no he podido resistir compartirla. Y además… es una gozada saber que la certeza que es lo que realmente significa la fe… es la que mueve montañas. 

Por otro lado, se ve muy bien como los «protocolos» que aquí ya vamos conociendo, se cargan toda la autenticidad de cualquier lugar en aras de la seguridad, de … ¡de la estupidez!, eso sí: «es que los niños se pueden caer y se pueden matar!» claro, como toda la vida. Para eso está la formación, para hacernos sabios y completos… no idiotas.

Qué la disfruten. Gracias

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