Hace un tiempo un amigo hizo, en palabras de los psiquiatras, «un brote psicótico» y la familia le obligó a entrar en un hospital psiquiátrico y tomar un montón de pastillas de esas que «te dejan tonto», en palabras de ese amigo. 

Afortunadamente no fue mucho tiempo y él después dejó de tomar las pastillas por su cuenta, sin decir nada a nadie… hasta hoy. 

Pero…desde entonces, sus «amigos» y familia cada vez que él levanta un poco el tono o dice algo con lo que ellos no están de acuerdo y no están casi nunca porque provienen de otro paradigma, tienen otras creencias… dicen una frase típica «¿ya estás otra vez?» «a ver si ya vas a empezar otra vez»

Esa simple frase genera una revolución por dentro de malestar y se genera un toma y daca que no lleva a nada bueno. Eso lo verán en la peli perfectamente reflejado cuando el protagonista trata de hacer su vida y sus padres le vigilan, le cuestionan… ¡Así es muy difícil hacer nada! Es como si tuvieras que demostrar una y otra vez que estás bien, que todo está en orden (en su orden)… ¡cansino y desesperante!

Pasa lo mismo cuando de drogas se trata. Bueno de drogas ilegales porque parece que tomar esos pastillones o tomar valium para dormir no son drogas… ¡es como para reirse! Un buen amigo que tuvo una historia larga de tomar de tó, aún a día de hoy, después de muchos años, cuando dice algo que resuena a aquello tiene que oir de sus padres la misma historia «a ver si vas a empezar otra vez». 

Son esas frases – programa que lo desbaratan todo si no estás muy atento.

Les comparto, pues, esta peli que por supuesto es película y termina bien y fueron felices y comieron perdices… pero que nos brinda la oportunidad de ver reflejadas frases y actitudes … alrededor de las patologías mentales y cómo afectan a la hora de relacionarnos… 

Es curioso que el muchacho fuera «tachado» de «loco» y su padre que «disfrutaba» de un trastorno obsesivo compulsivo pasara desapercibido a ojos oficiales aunque ese trastorno fuera el origen de muchas alteraciones del hijo. 

También nos brinda la oportunidad de ver cómo un acto creativo como el baile ayuda muy mucho a revertir comportamientos violentos que se producen en una de las fases de la bi-polaridad que es el trastorno del que trata la peli. Cada uno encuentra su «recurso», ellos encontraron el baile. 

Qué la disfruten, queridos viajeros de luz. 

Gracias, gracias, gracias. 

Los diálogos son todo un curso para entender programas, la verdad… seguro que muchas de esas frases las han oído alguna vez, ja, ja.