¿De quién depende la belleza?

Incluso diría más de la mitad… Si el 97% de lo que procesamos se hace en el inconsciente… imáginense si depende de la persona que mira. Y es gracioso pero decimos a menudo «yo solo creo en lo que veo» como si la visión fuera objetiva, como si nuestros ojos nos informaran de la verdad de los hechos, de la realidad… y nada más lejos de lo que es.

A lo mejor a esa frase la deberíamos de dar la vuelta y decir «solo veo lo que creo» y estaremos más cerca de lo que en realidad pasa pues son las creencias de la persona (y la mayoría como sabemos están guardaditas y olvidadas en el baúl del inconsciente aprendidas en los principios de nuestros tiempos, en el seno materno, en el cole, en la familia, en la … ) las que «controlan» (aunque nos cueste admitirlo) ese 97% de lo que percibimos. ¿Dónde está ahí la objetividad de lo que vemos? Pues, viajeros, bastante lejos.

Y desde que he llegado voy sintiendo que esa es la verdadera clave de nuestra paz y la que necesitamos ejercitar pues la fuerza de la costumbre, el vértigo del día a día nos alejan de lo importante: caminar en el sentido de ampliar, de revisar todas esas creencias, de no aferrarnos a lo que siempre hemos hecho (la fuerza de la costumbre es la gran trampa de nuestra iluminación), de no resistirnos a lo que intuimos, de soltar anclajes, amarras… de dejarse sostener por la Creación que en definitiva es quien sabe pues lo lleva haciendo desde siempre.

Sin duda esto último se nos hace «complejo», nuestra «razón» no deja de interferir con sus «peros» y otras trampas que bien conoce…

Soltarse…nos sostienen.

Gracias, viajeros. El taller empieza mañana, prontito para que no tengamos que correr…Como estamos en un campo cuántico estaremos todos allí de alguna manera… ¿les puedo pedir que me sientan serena, lúcida y sobre todo dejando que sea el Universo el que nos guíe en la transmisión?

Desde mi corazón, les agradezco su estar aquí, su compartir los ratitos, su compañía, su caminar al lado …

Gracias viajeros. Les espero mañana en un rinconcito de mi corazón