¡Gracias Juan por el cartel!

Buenas tardes, viajeros

Me da mucho gusto comunicarles que me encuentro de nuevo en servicio gozoso, por el este de España, en Vila-real (Castellón) a desarrollar un segundo taller de ampliación de consciencia a través de las herramientas y los recursos que la Creación ha tenido a bien desplegar ante mis ojos para utilizarlas e integrarlas sobre todo en mí y así poder transmitirlas a otros como vivenciales.

En esta ocasión seguimos ayudándonos de la biodesprogramación que nos ofrece la BioNeuroEmoción y los recursos sencillos y prácticos que la Tradición China transmitida en la formación recibida en la Escuela Neijing ha puesto a nuestro servicio y utilidad, como el qigong, como el masaje energético…y la ¡bendita intención! que son de por sí, por su naturaleza, recursos biodesprogramadores de códigos adquiridos a lo largo de nuestra andadura … además de los «heredados» de nuestros ancestros.

Personalmente me siento profundamente agradecida a todas las personas que se han dedicado a investigar en este mundo del transgeneracional para ahora nosotros tener la oportunidad de comprender y trascender de forma sencilla muchas de nuestras vivencias.

El taller será el finde, 5 y 6 de Abril por si hay personas que viven cerca y quieren acercarse. Será eminentemente práctico para que después cuando lleguemos a casa podamos seguir haciendo lo que vamos a aprender.

En todo este tiempo he ido viendo que aplicar la bio es el primer paso cuando sentimos un síntoma, cuando ese síntoma ya se ha formalizado como enfermedad o cuando sentimos que tenemos problemas para relacionarnos… es decir, que es una forma de percibir ahora sabiendo la ruta. Y además tiene un detalle añadido, ja, ja: y es que ya no te puedes esconder ni engañar ni ponerte peros. Y eso te baja mucho los humos.

Por otra parte, es profundamente aliviador saber que no tengo que luchar contra nadie ni contra nada, especialmente contra la enfermedad (al hacerlo solo luchamos contra nosotros mismos, ¡adivinen quién pierde!) porque resulta que ella es como una proyección en nuestro cuerpo, en nuestra biología de la emoción X no expresada  que hemos vivido con conflicto, es decir, sin coherencia entre lo que pensamos, sentimos y hacemos, esta es la clave.

La lucha no me sirve, al revés, me impide sanar porque es como que vamos en contra de nosotros mismos: el inconsciente, para salvarnos la vida, proyecta una solución que se refleja en nuestro cuerpo y nosotros vamos y luchamos contra la solución que tan buenos resultados ha dado a lo largo de la evolución de las especies.

Si a eso le añadimos que nos creemos separados del Universo, del Todo, de la Creación… se nos olvida que solo nuestro pensamiento unido a una emoción es capaz de generar la proyección. Y como se nos olvida, nos creemos lo que nos cuenta el exterior y pensamos que alguien externo a nosotros nos tiene que curar. Un galimatías que ya vemos que en general no funciona como nos gustaría y que nos trae muchos efectos colaterales.

Cuando el corazón hace esa toma de conciencia, agradeces infinitamente el trabajo de la bio en transmitir el mapa del tesoro que nos enseña a ver la relación entre síntomas y lugares muy específicos en nuestra biología. El lugar donde se proyecta el síntoma, la enfermedad o el problema relacional… no es casual sino todo lo contrario: sigue unas leyes muy concretas y sabiendo dónde… podemos ir a qué y buscar la historia oculta  y disolver la emoción, la función que en un momento dado no se ejerció. Por eso, también es tan importante sentir, sentir la emoción, sentirla y dónde. La vida que llevamos habitualmente no nos ofrece la oportunidad casi de sentir.

Y es ahí, después de esa toma de conciencia donde empieza el camino gozoso… el de conscientemente, “con intención”, “adrede” (que decían en mi pueblo)… promover, vivir, aprender… los recursos que me permitan ampliar esa consciencia, ampliar esa mi particular percepción de lo vivido … sabiendo ya, que es desde mi ser que brota lo que vivo, que lo externo no tiene la culpa ni es responsable de cómo vivo yo, que depende de mi percepción así sentiré y así viviré gozosa o conflictualmente lo que viva.

Ahora ya disponemos de recursos y muy variados para llegar a ese inconsciente para hacer conscientes algunas «oscuridades» y así por fin, entrar en coherencia que es el objetivo del camino: Vivir en coherencia. Pues si los tenemos, vamos a ejercitarlos.

Y en ese camino de ampliación de consciencia recursos sencillos como los que ofrece una tradición antigua y sabia como la china… nos ayudan «sin esfuerzo». En la medida en que los realizamos (subrayo en la medida en que los realizamos): qigong, masaje… «sin esfuerzo» nuestro inconsciente va haciendo esa labor de purificación, de disolver patrones antiguos de pensamiento, de sentires «dependientes»… que acelerará el proceso mágicamente.

En esas estamos viajeros. Con humildad,  pues se que todavía me falta mucho de aprender, de disolver y sobre todo de ¡trascender! Que eso a veces lo vivía con conflicto: ¿cómo me voy a poner yo ahí si todavía hay esto o lo otro…? Después de tomar conciencia de mi labor… me doy cuenta de que es transmitir lo aprendido, lo vivido, lo integrado, los recursos que me han sido y están siendo válidos en mí, en mis procesos…y en eso no hay error pues lo que pueda decir o presentar …lo he vivido, lo he ejercitado…

Por ejemplo, uno de los recursos a emplear para ir hablar con el inconsciente y que nos entienda es el teatrillo: en el primer taller el teatro lo hicimos nosotros, el equipo… en este segundo lo harán ellos y solo con eso ya dispondrán de un recurso genial para llegar al inconsciente y ver lo que hay ahí… ordenar, sugerir, disolver… y sobre todo tomar consciencia de que el cambio de percepción ha de partir, ha de brotar, de surgir desde nuestro corazón. Desde el de cada uno y como eso se siente y no te puedes engañar… no hay error.

Viajeros, un placer disponer de esta oportunidad de transmitir.

Gracias desde lo más profundo de mi corazón. Gracias.

CARTEL TALLER ABRIL VILLAREAL III