En ese miedo al fracaso hay muchos «programas» incluidos en cada uno con ciertas diferencias pero el sentir el mismo Ayer, madre – la mía – vino a urgencias y ya la dejaron ingresada. Fue un día de verme y verme y volverme a ver. ¡¡¡Pues trabajito me queda!!! Y yo que me creía… ja, ja, Por la noche, el sentir de culpabilidad… casi me arruina el sueño. Más labor a hacer. Gracias, viajeros. Estando en esos lugares llamados hospitales – hay para reflexionar suficiente para hacer un blog con ello – no se si voy a poder comunicarme durante todo el día. Hay café recién hecho… sírvanse a su gusto y no dejen de visitar los diferentes espacios y los que parecen más antiguos, también. Muy agradecida con su presencia. Gracias, viajeros
ALMA – JAQUE – AL ALMA 25 ABRIL 2014
ATREVERSE
Hacer sin miedo al fracaso, es la mejor opción ante la idea de intentarlo.
J. Padilla Corral. Escuela Neijing
Imagen: http://www.enterao.com/2011/08/05/para-una-mejor-vida/
El lamento no viene a cuento ni trae cuenta 
¡Cuánto más complejo es esto de vivir!….Llegada cierta edad ,el miedo al futuro incierto(si es que lo hay),por momentos es difícil de manejar……al igual que el abandono,el desamor,la mentira……PRONTA SALUD PARA LA MAMI, Y SALIDA DEL HOSPITAL….(.Y te va pasar por todo el cuerpo, una película dura ….eso es el hospital….una lección dura de roer.)Gracias por el café……aún noche oscura en mi ciudad en provincia de Buenos Aires,del sol ni un rayito aún….algún que otro hornerito y gorrión cantando…Abrazo…..
Gracias Graciela… por tus ánimos y compartir. la verdad es que la estancia está siendo muy fructífera una vez que ella se ha quedado tranquila sabiendo que en realidad «no tiene nada» (que a veces les fastidia más que si «tuvieran algo», ja, ja). Ha habido conversaciones muy jugosas en las que han salido secretos largamente escondidos y que seguro han hecho lo suyo en lo físico también… En fin, que estoy muy agradecida a la vida … yo le entregué este proceso a la Providencia, al Espíritu Santo… y está siendo todo como «milagroso»…
Abrazos, Graciela… como estamos unidos todos, te envío la luz y la vida que por estos lares ya se desarrolla plenamente y me alegro de oir a esos horneritos y gorriones cantando. Un placer, como siempre