Imagen tomada de http://www.marketingdirecto.com/marketing-general/marketing/entre-marketing-online-y-marketing-offline-ha-dejado-por-fin-de-haber-muros

Buenos días, viajeros de luz

¡Lo que hace el no saber! Es como el no ver… que te puedes caer o darte un tortazo con cualquier cosa que haya… porque no ves. 

Pues eso me pasó a mí en mayo, el 18 de mayo para ser más precisos en que publiqué la última entrada en esta versión del blog. 

Les cuento: 

Ya llevaba un tiempo pensando en actualizar un poco el blog de El lamento no viene a cuento… ni trae cuenta para poder introducir y transmitir talleres y cursos on line ya que la formación es uno de mis dones y esta plataforma es genial para llegar a todos ustedes y a otros que todavía no han llegado. 

Claro, si no sabes de estos medios tecnológicos pues confias en que un «profesional» lo haga. Ya he visto que no es tan fácil ni encontrar un profesional que sepa de lo que tú necesitas – un blog no es un producto a vender ni sigue las mismas leyes del marketing que otros productos, seguro – ni es fácil explicar tampoco lo que tú quieres y necesitas. Ufff, eso se está convirtiendo en mi reto personal, ja, ja. 

Bueno, pues allá por mayo pregunté a un amigo que me recomendara a alguien. Lo hizo. Esa persona no podía hacerlo y me recomendó a otro. Bien, hablamos, le expliqué y me dijo: fácil, lo primero que vamos a hacer es llevar el blog de la plataforma de wordpress a otra independiente que te permitirá después hacer una página web más flexible que si utilizas plantillas de wordpress. Me pareció bien. 

El día que me llamó para decirme que ya no escribiera más, que ya había comenzado la migración… sentí un vacío, un vértigo en el estómago. Seguro que todos tenemos experiencias con los cambios de empresa de telefonía, empresa de … siempre pasa algo con lo que no contabas. 

Y pasó… es posible que también pasara por esa creencia mía de que siempre pasa algo. A lo mejor… el caso es que cuando yo intenté entrar en ellamentonovieneacuento.com no me llevaba a ningún sitio… Es verdad que en unos días la cosa se fue arreglando pero había amigos que me llamaban y me decían que qué pasaba con el blog que habían intentado entrar y no les llevaba a ningún sitio, aparecía una página en blanco diciendo que lo sentían pero que esa página… 

Es como cuando vas a una tienda que recuerdas que había en tal sitio y cuando llegas está cerrada y no han puesto a dónde se han trasladado. 

El resto del mes de mayo fue un «vivir sin vivir en mí», ja, ja. 

Durante el verano todo se fue normalizando,  pero yo echaba de menos a muchas personas que eran asiduas, que comentaban, que animaban y que no habían llegado a la nueva ubicación pero como yo creía que cuando uno migra a otro lado, ya no queda nada en el lado anterior (era mi creencia, ya verán cómo influye) … pues ni hice el intento de mirar, de abrir… porque supuse que no estaba, que allí ya no habría nada. 

Las suposiciones son casi siempre falsas. 

Hace unos días estaba en Madrid de paso para ir a Levante a acompañar a una amiga en su cumple. Como tenía tiempo pensé en compartir una entradita en el blog. Le pedí permiso a la amiga que me alojaba en su casa para utilizar su ordenador y tecleé «Ellamentonovieneacuento.com» y por arte de magia me apareció el anterior, el que estaba alojado en wordpress y ví por el contador que habían seguido entrando personas. Entonces ¿seguía funcionando en esta plataforma? 

Y entonces recordé que de vez en cuando me entraba en el correo algún comentario que venía de wordpress pero como no entiendo, lo dejaba pasar… a veces pasan cosas tan raras con los ordenadores… 

¡Qué jaleo! El caso es que casi con susto… entré en el panel de administrador y ví que podía hacerlo… y que incluso podía acceder a comentarios y más… que incluso podía escribir. ¿Cómo? ¡Y el profesional cuando me vió tan «alterada» por la pérdida ¿no me dijo que se podía avisar, que se podía decir dónde estábamos?! 

Claro, es el primer impulso… la responsabilidad es de otro. Y sí, era pero también mía. No se puede uno esconder tras el parapeto de «yo no sé, yo no entiendo». Pues ponte al día, ja,ja. 

Y aquí estoy, viajeros de luz, para confesarles mi alegría infinita por poder contactarles de nuevo. Ya sé que muchos de ustedes volvieron a encontrarnos, lo sé. Pero también sé que otros muchos, por no saber borrar las rutas pre-establecidas en el ordenador u otras razones… no volvieron a saber de nosotros. 

Y lo importante no era saber de nosotros, que también,  (¡no saben qué bien descansé el día que me dí cuenta de que podía de nuevo contactarles!) sino porque sé que las herramientas que compartimos son válidas y muy útiles para nuestra evolución. Y es lo que más me gusta hacer, transmitir y transmitir sabiendo que ustedes están ahí y lo reciben. Si no, se produce como un vacío en el alma. 

Para aquellos que no llegaron nunca al nuevo lugar, aquí les dejo el enlace para que volvamos a contar con su presencia, con su compañía, en este caminar de evolución.

Estamos en: 

https://ellamentonovieneacuento.com/

Desde mayo … ha habido muchas entradas nuevas. Ojalá les sirvan como a una servidora. 

Un placer y un honor, volver a contactarles. 

Gracias al Universo, a esta energía que sabe hacerte lúcido en el momento necesario. Y gracias a ustedes, viajeros de luz, porque saberles ahí impulsa mi camino y le pone un gran sentido a mi vida, a mi camino, a mi compartir. 

Gracias, gracias, gracias. 

He visto que también que en esta plataforma que no había tocado desde mayo se han ido acumulando los comentarios y consultas … vamos a ver cómo encontramos tiempo para ir contestándolos. Será un reto de paciencia, ja, ja… para todos. 

De nuevo… ¡Qué alegría!