Entrada publicada originalmente el 04/05/2017 en www.ellamentonovieneacuento.com
Buenos días, viajeros de luz
Hoy les traigo a compartir una conferencia de Daniel Gambartte, bio descodificador argentino al que todavía no conocí personalmente aunque pienso hacerlo la próxima vez que vaya a ese hermoso país.
El domingo desayuné con dos queridas amigas… y claro, en la conversación, salen achaques de unos y otros. Hay una frase que se repite y se repite: «es que claro, ya con la edad te pasa esto o te pasa lo otro». Y hay otra mágica entre nosotras las mujeres: «es que con la menopausia te queda A, B, C… «
Yo siempre digo «yo soy mayor y no me pasa eso y ya he pasado menopausia y tampoco me pasa eso que dicen los médicos y las leyendas urbanas que nos pasará». (Claro que me pasan cosas … pero no por la edad ni la menopausia)
A veces intento explicárselo y dependiendo de las caras que vea … sigo o paro porque en realidad no hay que dar información (no por no darla sino porque no se recibe) a quien no la ha pedido.
Y es que mientras que pensemos que la enfermedad es el problema … hay pocas soluciones pues siempre necesitaremos y querremos hacer algo – luchar – para solucionar el «problema-enfermedad», para eliminar la enfermedad pues hemos puesto el foco fuera: es la edad, es la menopausia, es el frío, es la corriente, es …y lo iremos empeorando todo.
Sin embargo… resulta que la enfermedad es la solución adaptativa que nuestro inconsciente biológico – el que está todo el día y los 365 días del año mirando por nuestra supervivencia – ha ideado para nosotros: así pues, si voy contra la solución que el inconsciente biológico tenía en su base de datos para el sentir que sea que haya debajo de ese síntoma… tendrá que idear otra solución … y esta vez con más bombo para que no podamos obviarla.
Es cierto que nuestro inconsciente biológico habla en términos pelín pretéritos y por lo tanto idea soluciones que para entenderlas hemos de pensar en términos de supervivencia, de protección… ¡de territorio!… Eso sí, sabiendo que siempre hay un sentido bio – lógico positivo … para empezar, hay menos stress pues no tenemos que ir contra nadie, solo tenemos que comprender qué nos está diciendo el síntoma, el para qué: como decía Cantinflas «¿para qué soy bueno?».
Pues eso, para qué es bueno, qué sentido tiene el síntoma.
Hace años, antes incluso de la formación de medicina china, cuando había alguien que explicaba o que decía que tal o cual síntoma quería decir lo que fuera, siempre me pregunté cómo lo sabían, en qué se basaban para decir que la enfermedad te estaba diciendo X, Z o Y. Gracias a los estudios del Dr. Hammer y los de otros muchos estudiosos en bio – descodificación, neuroemoción… fuimos conociendo los por qués y los para qués.
¿Saben una cosa? el primer idioma que podríamos aprender de pequeños – y nos haríamos un grandísimo favor para el resto de nuestra vida – sería aprender la LÓGICA BIO – LÓGICA: es decir, cuál es la lógica de que cuando tenemos frío… tiritamos o cuando estamos al sol…nos ponemos morenos. Y no es algo que hagamos conscientemente, nuestro sistema lo hace por nosotros con una lógica aplastante. Estos dos ejemplos los entendemos fácil, sin embargo luego cuando llegamos a una cistitis, a un dolor de rodillas, a una tuberculosis o cualquier otro síntoma incluso más grave para la medicina occidental… no vemos por ningún lado la bondad de nuestro sistema ideando soluciones adaptativas.
En esta conferencia, Daniel Gambartte explica como si fuera una clase todo este proceder de nuestro sistema. Ya verán que siempre hay una lógica, que nuestro sistema va a favor nuestro … no en contra y así pues no entiende nuestra lucha CONTRA cualquier síntoma… pues ¡es una solución! Es una solución lógica y además con un sentido biológico positivo. Esto último cuesta integrarlo (es como lo del sol que sale o se mete…que ya sabemos que no es así y sin embargo seguimos diciéndolo) pero llegará, todo llegará.
También es interesante recordar que los síntomas aparecen en la fase fría, en la fase de resolución, en la fase de vagotonía. No aparecen normalmente en la fase de stress pues el sistema tiene suficiente con gestionar ese stress. Aparecen cuando nuestro bendito sistema siente que nosotros no tenemos la solución… ni la vemos siquiera. Entonces, él saca su catálogo y elige la que mejor se adecua al sentir que tenemos ya sea de sumisión, que nos han invadido el territorio y no sabemos cómo actuar para que sentir que es nuestro, que nos sentimos desprotegidos, que no sabemos cómo proteger… todo un mundo de sentires que nuestro sistema escucha todo el rato y al que reacciona para nuestro bien.
Daniel utiliza el ejemplo del ratón y el gato que utilizo también en mis talleres y con el que se entiende muy bien todo: el stress y la resolución. Imaginamos que un ratón que andaba olisqueando en busca de su comida de repente ve a un gato y sabe perfectamente que el gato se lo comerá si tiene hambre. El sistema de todos los seres vivos con patas – las plantas no pueden hacerlo pero tienen los suyos propios – ha ideado la huida como primer elemento de salir del stress y para que el ratón pueda huir más eficientemente, crea más células pulmonares para tomar más oxígeno y poder correr más. Si el ratón tiene la suerte de encontrar un lugar donde esconderse y SENTIRSE a salvo, jadeará el tiempo proporcional al que ha corrido huyendo y se deshará de las células excesivas de pulmón que había creado para huir. Punto final.
Importante el dato del «tiempo proporcional» porque para el gato fueron dos minutos pero para otros stresses humanos pùeden ser años… y los síntomas serán en proporción al stress que tienen que solventar.
Si esa misma historia la llevamos al ser de humanidad, la cosa cambia y se alarga indefinidamente muchas veces no por el sistema sino por nuestra manera de percibir, de vivir, de temer. Me explico: si yo voy al médico y me da un diagnóstico grave y se me nubla la vista del susto, dejo de oir y no veo solución a eso que me diagnostican por mis creencias, mi sistema hace lo mismo que con el gato: crea más células de pulmón para que yo pueda salir huyendo pero… como no puedo huir a ninguna parte – o eso es lo que creo – y además entro en el bucle de pruebas, consultas… el miedo y el stress siguen, todo el día le estoy dando vueltas a eso que siento que no puedo solucionar… y el sistema sigue creando células pulmonares para que pueda huir que es lo que el sistema tiene como primera solución: «sal corriendo». Si eventualmente el diagnóstico no era válido o por lo que sea creo que si podré solucionarlo… ahora el sistema tiene que deshacerse de las células que creó para huir. ¿Y eso cómo lo hace? pues a través de tos con esputos, por ejemplo… sanguinolientos además. Lo que ya termina de asustarme, voy al médico y ahora tengo tuberculosis. Y eso me da un motivo más de stress. Si ese diagnóstico primero siguiera adelante, cuando me vuelvan a hacer una prueba donde ven… verán muchas células de pulmón y creerán que es un tumor de pulmón. ¡Ole! Por eso, muchas veces después de un diagnóstico de un tumor X… aparece lo que ellos llaman metástasis en pulmón que no es tal sino la respuesta a un conflicto de miedo a morir. Diferente conflicto y su solución.
Cuando hablamos de tumor, de cáncer… hablamos de una producción extra de células de tal o cual órgano, tejido… para hacerlo más eficiente: para que pueda digerir mejor, para que pueda alimentar mejor (está estudiado y comprobado que la leche de una mujer con tumor en mama… es más nutritiva. ¡Anda!), para que pueda proteger mejor, para que pueda … mejor. Es la solución que tiene en la base de datos para optimizar el órgano o tejido que sea.
En ese desayuno con amigas, una de ellas dice: «entonces, ¿quieres decir que si pudiéramos estar tranquilos, descansar y ver las cosas de otra manera… todo se sanaría?» Pues sí. O en buena parte al menos, pues antes o después nos iremos a otros «lugares». Aunque a lo mejor también solo es una creencia.
La hija del Finder que partió hace ya casi dos años decía que lo que más la descorazonaba y asustaba… era la mirada de los otros. Ella leía en esas miradas que era imposible salir de esa situación y que la sentencia ya estaba escrita. Y se cumplió. Es como si fueras la protagonista de «una muerte anunciada». Así pues, parece ser que el entorno es vital para la vida de cada cual. Tan vital que a veces te puede ahogar con muy buenas intenciones (de ahí la importante ayuda de hacer una cuarentena).
Es por eso que me parece fundamental conocer, integrar y aplicar la Lógica Bio – Lógica para entrar en coherencia vital que es la única forma en la que el sistema no está en stress, como si pensara «no hay nada de que preocuparse, él o ella sabrá actuar en base a su sentir»
Es cuando el pensar – sentir – hacer no está en coherencia (pienso que no quiero ir, siento que prefiero quedarme pero voy por la razón que sea… ) cuando el sistema automático de resolución de stress tiene que tomar el mando y actuar a su forma. Si entendemos la actuación porque sabemos la lógica… y tomamos conciencia de qué está pasando… actuaremos en coherencia a nuestro sentir – caiga quien caiga si alguien tiene que hacerlo – y no habrá respuesta adaptativa a ese conflicto de fuerzas cuyos ingredientes son el miedo y la culpa en gran medida. Si no entendemos el lenguaje… creeremos que todo nos va mal, que mira lo que me ha pasado otra vez, que qué mala suerte tengo, que la culpa la tiene el otro y los síntomas adaptativos se irán añadiendo unos a otros en cadena.
Nadie dice que sea fácil. Sin embargo es posible. Y el camino comienza transformando la mirada, el sentir que «siento» con lo que miro, lo que escucho, lo que toco… y transformando la mirada hacia mi ser. El camino puede ser cómo cada uno quiera y esté dispuesto a transformar.
Afortunadamente para los que siempre preguntan – preguntamos: «y eso ¿cómo lo hago?» acude al rescate, ja, ja, la terapeútica en base a la medicina china. Especialmente indicada para «mentales – racionales» pues actúa en lo sútil, en el campo energético que es el único susceptible de producir cambios en lo denso, como bien dice el mago Parise. Por eso, en mis talleres de bio incluyo prácticas con resonadores – como el Circuito Puesta A Punto Energético – y Qigong porque he comprobado que actúan como bio – descodificadores, desprogramadores naturales. Y eso es todo un regalo. Por ello, añado el cartel para el próximo taller de Auto – bio – descodificación, para todos aquellos que no saben cómo hacerlo, ja, ja. Yo incluida a ratos, ja, ja.
Hablando de ratos… no hay excusa para ver la conferencia que comparto de Daniel Gambartte… se puede escuchar a ratos, ja, ja.
Gracias, viajeros de luz, por esta impagable oportunidad de compartir y compartirme.
Gracias, gracias, gracias.
Buenos días, viajeros de luz